¡ Hola ! Gracias por estar aquí
Me llamo Valentina Barreiro Rodríguez tengo 29 años, vivo en la ciudad de Canelones, Uruguay.
Fotógrafa infantil desde hace 6 años.
Soy la menor de 4 hermanos y tengo una gran familia, junto a mi pareja, que me han acompañado incondicionalmente en este proyecto
Desde muy chica sentí conexión directa con el arte. Tan así fue que siempre en trabajos liceales dedicaba gran parte de mi tiempo e imaginación a la parte gráfica (diseño de tapas, presentaciones, videos, maquetaciones) y si bien mis estudios no fueron orientados a ese rubro, lo fue si la educación terciaria, como le llamamos en mi país, a la que decidí lanzarme al 100% por lo que amaba hacer.
Estudié diseño gráfico, el cual me permitió – entre otras cosas – años después poder personalizar cada trabajo de forma única para mis clientes
A la par acudía con gran ilusión a una escuela de fotografía en donde adquirí todos los conocimientos sobre el manejo de la cámara, desde la base de la fotografía analógica, revelado en laboratorio, producción, postproducción, edición y presentación.
Con mi primera cámara réflex en mano, salía con gran timidez a las calles a hacer fotos de paisajes, flores, hojas, y todo lo que se cruzara en mi camino. Pero mi gran admiración eran los atardeceres y tenía carpetas llenas de ellos.
Un día surgió la oportunidad de documentar mi primer cumpleaños infantil. Fue una alegría inmensa por toda la repercusión que tuvo; tan así fue que desde ese momento nunca más paré de hacerlo y encontré mi gran pasión en la fotografía de niños
También por el camino hice trabajos de 15 años, bodas, producto para tiendas de ropa, pero sentía que tenía que ir por lo que me hacía realmente feliz y así fue.
Esa felicidad la encontré en ver crecer a cada familia a través de mi lente, en cómo vuelven a elegirme año tras año; también lo son cada devolución llena de cariño y palabras de aliento que inspiran a dar lo mejor de mí.
Actualmente debido a la pandemia se han suspendido muchísimos eventos, por lo cual el trabajo se ha centralizado totalmente en sesiones. Así que he aprovechado este tiempo para seguir capacitándome y reforzando conocimientos en formato online.
Me encuentro concretando mi gran sueño de tener mi propio estudio de fotografía, en base a esto comencé con la fotografía de retrato a la cual quiero dedicarle todo mi esfuerzo, dedicación y sobre todo AMOR.
Como dice mi slogan: “Una mirada fresca, sensible e inmortal”, espero que cada imagen sea el tesoro de una familia para el resto de su vida.